jueves, 28 de abril de 2011

Y sí, 1º de mayo, Día Internacional del Trabajo, Día del trabajador. Y para que este día pudiera entrar en la historia de la humanidad, los hermanos tuvieron que luchar por mejores condiciones de trabajo, recibir bautismos de fuego.  
¿Cuándo el hombre no deja de trabajar? A cada etapa de la vida, un trabajo, una tarea, una pasión. Ellos nos permiten sentirnos libres y dignos. No sólo ponemos en marcha nuestro intelecto, espíritu, nuestro cuerpo, sino también transformamos la visión del mundo en el que estamos. Y así como el trabajo humaniza, su ausencia deshumaniza y nos sume en la apatía, y en la pérdida del sentido de la vida. En la medida en que tengamos la posibilidad de continuar pensando y proyectando, somos valiosos y libres. Por eso, amigos, colegas, lectores, los que intentamos proyectarnos a través de la palabra, de la creación, en cualquiera de sus múltiples aspectos, quizás logremos mirar más allá, intentado descifrar mensajes y gozar de ese mundo que nos hace mejores, más solidarios y humanos. Persigamos su ideal.






Sembradora

 
Soy la jardinera sin paga
y de a puchitos
que entre flor y flor
quita las hojas secas
y agita las plantas para que caigan
a borbotones
las semillitas.


Por eso
cuando emerge la flor
en no sé qué momento
el perfume y el color
me extasían.

Desmedido pago
me está obligando
a la siembra
perenne
de la poesía.



De Poemas de la Soledad






lunes, 25 de abril de 2011

Eva decidió seguir hablando

Con este sugestivo título llega a nosotros el libro Poesía de Mujeres en el Noroeste Argentino, coordinado por las escritoras Raquel Guzmán y Miriam Fuentes de Salta. Ellas manifiestan, desde el prólogo, que han deseado realizar una Muestra Poética y no una Antología. Una manera de presentar su compromiso con la vida, con la palabra. En el Epílogo del libro R. G. agrega que ‘La poesía escrita por mujeres en el noroeste argentino fluye acicateada por la tradición cultural, la subalternidad, las peticiones de los roles domésticos, y a la vez tensada por las transformaciones del mundo, los debates acerca de la sociedad y la política y la certidumbre del cuerpo. Discurre así de cara al mundo cotidiano pero atravesándolo más allá de las apariencias, de las ‘urgencias del paisaje’, de los excesos y los circunloquios.
Esta poesía que hoy se escribe se desplaza con-vocando, trayendo sobre sí el peso y la intensidad que fue abriendo la trama rígida de la tradición desde la potente voz de Sara San Martín, que desde el grupo de La Carpa inicia una trayectoria que interpela al mundo, a los hombres, a la historia. Quiebra así la tradición poética de un decible femenino y se constituye en voz polémica comprometida con su tiempo e implicada en los debates que este impone...’’
Hojeamos esta Muestra de poesía y observamos la palabra de mujeres que han nacido o residen en Salta, Tucumán, Jujuy. Pensamos que este libro está constituido por diferentes voces, pluralidad enriquecedora. Todo aporte para la difusión de la poesía es bienvenido y deseamos éxito en la intención. El lector tendrá la última palabra en esta mirada poética, como siempre.

De modo que, Eva... adelante, no dejes de poetizar.
Susana Quiroga

LUCÍA



- Porque yo nací
en casa blanca
techo a dos aguas
en alto,
con grandes listones
y palos
hecho a hacha y sudario.
Tientos atados, adobe,
barro.
Casa donde mueren
los otros,
donde a los otros
velaron.
Se desparrama el cielo
por los agujeros
calados.
Ventanas, surcos
Rejas de antaño.
Ya no está…,
Ayer sí
Y mi casa
Sigue en pie
blanca de adobe.
De paja y pelos cruzados
y en el corazón
Lucía
Dos astillas se me incrustaron.

Teresa Quevedo, jujeña  
 
- llueve ternura
en la puna del alma
(desprenderlo todo
hebra a hebra
letra por letra:
desconectarse.
El viento pastará alguna verdad
sublevada como cardo.

Rebeca Chambi, jujeña
DESDE EL LÍBANO



- En acrobacias continuas
el azar teje sus modos de ser
su cabellera desparrama perfume de cedro.
Sus caderas orientales
parecen no saber de la belleza
sus ojos grandes sin medida
arrastran a Beirut
a través del océano.
Asad la busca
en los pliegues taciturnos
de una enagua verde agua.
En fragmentos de memoria
la historia de mi abuelo inmigrante
aflora en mi piel.

Amira Juri, Tucumán

 
 Me estoy quedando muda

- atiéndeme
quizás estas sean las últimas palabras
que salgan de mi boca
o tal pueda todavía decir:
 la llama está apagada
 el agua no hervirá nunca.
sólo queda el frío
del agua para bañarme
el hielo que correrá por mi espalda y
dejará en la garganta su estertor.
La mudez no impedirá estas palabras
empujándose en la
garganta
hasta hacerla estallar.
Las palabras estarán ahí taladrando tu oído
y el viento reirá y cantará por mí.

Raquel Guzmán, tucumana, reside en Salta.

De Eva decidió seguir hablando. Ediciones del Dock, Bs. As., 2009
 
 
Publicado en Suplemento Cultural. PREGON, domingo 14 de marzo de 2010


domingo, 24 de abril de 2011

Madre

-Ya las flores nos pintan la ternura
de este octubre
y la otra Madre nos aroma
y en un rosario de miradas
nos hallamos
            vulnerables,
            enraizadas
            indelebles
las abuelas con sus manos de harina
las bisabuelas con su piel de jazmines
y tu presencia, madre
              ardorosa de esperanza
y los hijos
             obstinados
             en el retorno

Y yo dejo que mis dedos
una a una
recorran esas cuentas
y les den forma
/en suave rezo/
de un tiempo empecinado
             desbordado
             de ansiedades

mientras tanto
un ángel nos contempla
trasnochado

de nostalgia

viernes, 22 de abril de 2011

poema

La hojarasca del otoño
se cuelga del aire
rumorea
mi nombre

en tu sangre

Poema de Susana Quiroga de su libro "Arcilla de mujer".
Bellísimo, auténtico, encendido, gran poeta. 

Palabras de Ernesto Rojas (Tucumán - Argentina)