“…Tilcara es como
un molle arrodillándose
para albergar
caricia de guijarros… R.G.
un molle arrodillándose
para albergar
caricia de guijarros… R.G.
Recientemente, el poeta, psicólogo, abogado, autor y
compositor, Ricardo G. Guzmán, publicó su libro de poesía ANCAÑOCAS
PARA PANTOJA. Conocíamos la poesía del poeta y deseábamos que surcara
nuevos caminos de lectores, más allá de los amigos, porque siempre supimos de
su estética. Finalmente, su libro, preciosa edición de Apóstrofe Ediciones-Jujuy.
Con respecto al
título de la obra confieso que tuve que recurrir al diccionario para conocer el
significado de Ancañocas, tubérculo entre
la papa y la batata. Pantoja, por
supuesto, el estimado plástico
jujeño y uno de los creadores de la significativa Revista cultural Tarja, junto
a Groppa, Busignani, Fidalgo, Calvetti. Este título, tomado de un verso del
poema Tilcara.
El libro está
dividido en tres corpus. Tanto los títulos como las dedicatorias nos revelan la
pasión de un lector que se nutre de excepcional literatura. Constantemente, a
través de Internet, nos constituimos en “contertulios” de Ricardo Guzmán. Así
nos enriqueció con su mirada universal. Ahora, lo hace con este libro. En él,
se evidencia una poesía depurada, conceptualizada con bellas imágenes, a través
de las cuales el enunciador expresa la subjetividad de un poeta que sabe mirar
el mundo exterior transmutado al interior, o viceversa. Y surge así la pintura
lírica-geográfica y universal del hombre que reflexiona ante significativos
hechos y personajes que lo conmueven y provocan su palabra. La palabra, agua, cada historia, un río que fija la memoria,
Poesía plástica,
honda. A veces, nostalgiosa y esperanzada, que nos impacta emocionalmente.
Ancañocas para Pantoja, llegaste para enriquecer las letras de Jujuy.
Felicitamos al
poeta.
Susana Quiroga
TILCARA
a
Guillermo Cabrera
Cielo guadañado por cenizas de primavera,
herido por flores que niegan abrirse
ante el silencio deschalado
de amautas desmemoriados.
A veces pienso
que Tilcara es como
un molle arrodillándose
para albergar
caricia de guijarros.
Ancañocas para Pantoja.
Evocación de días de azufre
y alas de mariposa.
Si ha de haber un amor
que sujete a la montaña.
Cielo guadañado por cenizas de primavera,
herido por flores que niegan abrirse
ante el silencio deschalado
de amautas desmemoriados.
A veces pienso
que Tilcara es como
un molle arrodillándose
para albergar
caricia de guijarros.
Ancañocas para Pantoja.
Evocación de días de azufre
y alas de mariposa.
Si ha de haber un amor
que sujete a la montaña.
RÍO DE
LOS PÁJAROS
Entre lo que siento y veo:
el río.
el río.
Entre lo que veo y digo:
los pájaros.
los pájaros.
Entre lo que digo y callo:
el río hospitalario,
destello candoroso
de flores silvestres.
el río hospitalario,
destello candoroso
de flores silvestres.
Entre lo que callo y sueño:
los pájaros
los pájaros
en un aguacero de infortunios descalzos.
Entre lo que sueño y olvido:
el río juega con el amor
y el pálido rayo del rencor.
el río juega con el amor
y el pálido rayo del rencor.
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