martes, 20 de agosto de 2013

17 DE AGOSTO DE 1850, MUERTE DEL GENERAL JOSÉ DE SAN MARTÍN




“-MADRE, quiero que me digas,
que me vuelvas a decir,
por qué a las tres de la tarde,
a las tres de un día gris,
la rosa no fue más rosa,
ni el jazmín fue más jazmín…” D.Z.

Un 17 de agosto, a las tres de la tarde, muere el General San Martín alejado de su patria, en Boulogne-sur-Mer, Francia.
                Hablar de San Martín es hablar de un hombre de acción y deber. Piel de guerrero, y a la vez, plena de sensibilidad.
                Su figura se identifica con la del Libertador y Protector  de nuestra nación, Chile y Perú. Se lo ha llamado también, con justa razón, Padre de la Patria. Supo  vivenciar su pasión por los libros, la educación y la cultura con sentimiento fraternal, más allá de las fronteras. Estas cualidades y valores han sido resaltados por historiadores que estudiaron su figura y su empresa libertadora, y cantados por los poetas.
                Fallece San Martín en Europa sin ver cumplido su deseo de regresar a América para concluir mis días en mi chacra y separado de todo lo que sea cargo público, y si es posible, de la sociedad de los hombres”.
                Con el paso del tiempo, su figura se fue engrandeciendo, hasta revelar en forma palpable sus acciones dirigidas a concretar sus sueños más caros de independencia y Libertad, no solo de su patria.
                Nos queda a nosotros, los escritores, manifestar la emoción que nos provoca  su personalidad que supo trascender  el simple concepto de hombre. Los documentos así lo expresan. En esta ocasión, presentamos dos voces poéticas argentinas, una del norte y otra del sur. La de un jujeño, norteño de pura cepa, Domingo Zerpa, en su bello Romance de la muerte del general San Martín, recitado con devoción por nuestros niños y jóvenes, y la voz de Francisco Luis Bernárdez, en su poema  de hondo lirismo que enfoca la grandeza del General, Meditación ante la tumba del General San Martín.
                Honor al Generalísimo de la República del Perú y Fundador de su Libertad, Capitán General de la de Chile y Brigadier General de la Confederación Argentina”, como firmaba sus escritos.
                Testimonio de vida, norte y ejemplo de amor a la Patria.
 Susana Quiroga

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_MADRE, quiero que me digas,
que me vuelvas a decir,
por qué a las tres de la tarde,
a las tres de un día gris,
la rosa no fue más rosa,
ni el jazmín fue más jazmín.

_Niño, a la tres de la tarde,
¿cómo te podré decir?
la rosa no fue más rosa,
ni el jazmín fue más jazmín,
porque a las tres de la tarde,
a las tres, lejos de aquí,
lejos del clavel del aire,
 y el aire de su país,
vino y se llevó la muerte,
al General San Martín.

­_Madre, a las tres de la tarde,
todos lo vimos partir;
iba en su caballo blanco,
por un camino de añil.
¡Qué fulgor el de sus ojos,
el de su voz, que clarín!
Brillaba tanto su sable,
que el sol no quiso salir.

_Si tanto brillaba, niño,
la espada de San Martín,
no brillaba por ser de oro,
que el oro no brilla así.

Si tan alto relucía,
¡Oid, mortales, oíd!
fue porque se hizo de día
la noche de Guayaquil.

_Por los caminos celestes,
cruza, madre, el adalid.
Cada astro es un granadero,
cada nube es un jazmín,
allá Gregorio Las Heras,
Soler y O'Higgins aquí.
Todos llevan en el pecho,
la estrella de Guayaquil.
¡Oh. Capitán de los Andes,
quién te pudiera seguir!
cierro los ojos y rezo
¡Padre Nuestro, San Martín!

 De Tranco a Tranco, 2000.
Domingo Zerpa, primer poeta jujeño que ha trascendió el conocimiento general de las fronteras de la provincia. (1909- 1999).

1 comentario:

  1. Las palabras justas de Domingo Zerpa que enmemoran a ese héroe de toda Sudámerica. Gracias por compartirlo!

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